Clima Laboral: ¿Con Nombre o Anónimas?
Esta mañana, un gran amigo me compartió unas Encuestas de Clima que me parecieron súper interesantes… salvo por un detalle que me atravesó moralmente: eran anónimas.
¿Qué pasa con el anonimato en las encuestas de clima?
En mi opinión, una vez más, fomentan la cultura del puñal por detrás. E insólitamente, es el departamento de RH quien las sigue lanzando. #HolaCoherencia!
Pero ¿Qué pasaría si las encuestas de clima fueran con nombre y apellido?
- Las personas se verían obligadas a autorregularse (gran concepto de la inteligencia emocional, según Daniel Goleman). Como pasa en el mundo del Customer Experience, donde las opiniones —en Google Maps, por ejemplo— cuando las personas quedan a la vista, con nombre y apellido, cuidan sus palabras hacia un abordaje con mayor responsabilidad emocional.
- La organización tendría un nuevo gran foco: aprender a comunicarse de manera más respetuosa y asertiva. Hablando de hechos, de emociones (sin juicios a terceros), de necesidades profesionales y con pedidos concretos.
- Y el departamento de People & Culture enviaría un mensaje claro, sólido, coherente: aquí hablamos con sinceridad y fomentamos una cultura constructivista.
¿Pero cómo se logra un cultura honesta y constructivista?
Creo que el primer paso es que People enseñe conceptos de Comunicación Asertiva a toda la organización. Marshall Rosenberg me parece el gran autor que puede ser nuestro aliado.
Y el segundo, me parece clave que todos los artefactos de investigación se revisen y se empiecen a diseñar con un enfoque de investigación sin juicios ni canibalización entre las personas.
¿Cuál será el valor?
A nivel investigación: esto traerá menos sesgos y sobre todo, mejores insights; porque serán dados con mayor consciencia y menos señalamiento del otro.
A nivel clima y cultura: esto traerá más seguridad psicológica, más confianza y definitivamente, mejor clima 😉
Conclusión: Qué hermoso empezar a tomar consciencia de lo que hacemos desde Recursos Humanos, para empezar a co-construir realmente culturas laborales más conscientes, más humanas, más coherentes y sobre todo, más constructivistas.
